miércoles, 20 de julio de 2011

Pensamientos futiles



Muchas veces estando en el curro, en la cama, o incluso - sí, amigos blogueros - en el váter, se me ocurren posts magníficos para esta sección chabacana de la blogosfera que es Status: Playing.

El problema es que cinco minutos después ya se me han olvidado. Han desaparecido como volutas de humos en un día de niebla (esto es un poco bladerrunero, lo reconozco), y no se que hacer.

Es entonces que me invade una desesperación un tanto futil, que a la vez me confirma la futilidad de mi propia existencia y los afanes en los que me tiene atrapado.

No sé si un remolino, o una veleta, ignoro la analogía exacta, pero el interior de mi craneo, desperdicia miles de millones de watios de potencia aerogenerada. Como si las turbinas rodasen todas locas.

Es cierto que los pensamientos, la mayor parte de ellos, y estos en concreto, nos vienen regalados. Pero verlos marchar así... Sin decir ni adiós, ni al diablo... ¿No es estáis de acuerdo conmigo en que es una pena?

Son como hijos malcriados que desvalijan el refrigerador, para luego no malgastar ni un sólo minuto de su tiempo, compartiéndolo con su progenitor. Con quien les dio la vida.

Debería odiarlos, pero no puedo. La sangre tira.


Quizás no debería estar tanto tiempo en el váter, o en la cama, o en el curro.

Quizás no debería pensar.


Sí, quizás sea eso lo que haga, dejar de pensar. Porque dejar de trabajar, de dormir, o de ... No lo veo factible en un corto espacio de tiempo.


El pensador. Auguste Rodin.

8 comentarios:

Merce dijo...

Lo que no debes dejar de hacer, mi querido Food, es de escribir. Hace mucho que no dejas caer por tu blog y, sinceramente, se te echa de menos.

Mis mejores ideas para hacer mis mini-relatos se me ocurren en los ratos de insomnio o mientras cojo el sueño; por lo general no me suelo levantar a escribirlos, y claro, al día siguiente no me acuerdo de nada de nada de nada...

Un beso.

Food and Drugs dijo...

Gracias por tus ánimos, Merce.
Estoy preparando un nuevo post, y anoche, que no podía dormir, me levanté a hacerle unos retoques al dibujo, pero fue coger el portaminas y caer como un ceporro.
Tengo que escribir, y no hacer tanto deporte, o mi cerebro, y mi aspecto en general, pasarán a ser el de un avestruz.
Muchos besos
;-)

Anónimo dijo...

Yo lo he intentado con todas mis fuerzas, y no me sale. Si no tienes costumbre, no lo hagas Foody: es imposible. Conozco a gente en cambio que tiene una habilidad inmensa para no pensar ni recordar. Quisiera convencerme de que son unos pobres infelices, pero me doy cuenta de que la infeliz soy yo, que por más que quiera, no soy capaz de centrifugar. Así me queda la ropa luego... :-) Hecha una pena.

Juanjo Montoliu dijo...

A mí me pasa lo mismo. Lo reconozco.

Pero tengo algunos pensamientos que son tercos y vuelven. Eso me salva.

A veces pienso que esos pensamientos fugaces deben irse, de la misma forma que debes dejar marchar un amor que ya no es.

Los pensamientos buenos se quedan.

Food and Drugs dijo...

Arancha:
La gente que no piensa ni recuerda, vive - es evidente - una vida de pez, imbuida únicamente de lo que ve a través del cristal de su pecera, o por llamarla de otra manera, la tv.
Ellos sí que son pobres de espíritu. Pobres, pero pobres de solemnidad...
;-)

Juanjo:
Con los años uno se especializa en dejar marchar amores que no son, jajaja.
No hay que traumatizarse por ello.
De hecho, estoy pensando en montar una consultoría al respecto, y ponerme un despacho con escritorio de caoba, silla con masajes, mueble-bar y becaria.
Si acaso tengo un pequeño problemilla con la financiación de la idea, pero cómo al fin y al cabo, ella también, va a ser una de esas ideas que se van sin decir ni mú...
;-)

Z-Kno dijo...

No te preocupes por eso. Te confieso que a mi me pasa muchas veces, por no decir todas. Aunque ya lo dice el refrán... "Mal de muchos, consuelo de tontos" a veces da coraje que se vayan como el humo. Aunque dicen los psicólogos que olvidamos lo que el subconsciente no valora como importante, como si alguien le pidiera opinión, en fin....

Te doy las gracias por tu visita y por pararte a dejar tu parecer.

Saludos.

Mato Grosso dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Food and Drugs dijo...

Ceferina:
Somos dueños de nuestros actos, pero no tanto de nuestros pensamientos. Eso nos exculpa un poco de las cosas que se nos ocurren a veces ¿no crees?
Saludos y gracias por devolverme la visita.
besos
;-)